sábado, 28 de enero de 2012

Recuérdame:


"Recordame del track olvidado, "Sin titulo", que marco nuestros pasos"

Recuérdame olvidar, porque para eso soy bueno,
más sin embargo, es la verdad, los recuerdos no existen en mi mente, me he puesto a pensar,
Cumpleaños, fiestas, graduaciones, aniversarios, muertes,
nada es tan duradero o eterno en mi cabeza.

Recordame, de aquellas fiestas con globos y comparsas de risas,
de aquellas fiestas, que nos hacían tan felices, un pastel para vos solo,
HEY! no te lo comas todo, le dije al niño de mis recuerdos.

De noches de pesadillas, noches lúgubres que nos hicieron llorar,
pero date la vuelta, la abuela esta allí, te toca la espalda y te acaricia sin decirte nada, ella que te ama tanto, ahora no sé puede mover, más sus lágrimas, en sus ojos corren salvajes, al saber de nuestra partida.

Recordame, el olor de la mañana, los días de asma... Los Días de estar junto a nuestra madre cortando flores en casa, luego de no poder ir a clases esa mañana.

Recordame a Emilio, sonriendo (a pesar del abandono de su Madre y de la ausencia de Padre), con su gran gorro verde y sus overoles azules,
en medio de todos, como diciendo "AQUÍ ESTOY", rescatándose de su soledad, al volverse mi hermano.

Recordame los juegos, los rostros de las niñas amadas,
las desilusiones, las largas caminatas para no recibir nada,
los ahorros y las perdidas de memoria, en las viejas máquinas del tiempo.

Recordame, Recordé a mis hermanos, El menor... Con el espíritu de un santo,
el cabizbajo, aquel que sabía y enseñaba, aquel que nunca te olvido.

El mayor, obstinado, tratando de encontrarse... Perdido en los mares de la adolescencia.

Recordaba, a mi... Siendo el último de la fila, quitándome la playera "Jesús te ama"
Siempre el callado, el tímido, el que nunca avanzaba, jugando en los campos, con mis buenos amigos gemelos.

Recordame a mi Padre, marchando de casa...

Recordame a mi abuela, muriendo un 10 de mayo.

Recordame tus ojos, cuándo te vi por primera vez sophia y recordame los míos,
para nunca olvidar, el pacto tan grande que hemos firmado.

Sí, hazme recordar tiempo, recordar historias olvidadas, que hoy no he podido contar, Recuerdame el color del cielo, en esos trayectos largo.

Recuerda a María Gil, muriendo de leucemía...
Recuerda despidiéndola un 23 de diciembre,
Recuerda el primer beso que le di, la primera carta que me escribió,
Recuerda la última vez que le vi, con esa mirada de furia,
Recordármela, aferrándose a la vida,
Recuerda, lo difícil que fue encantarla, recuerda los silencios, los ocasos,
Recuerdame, siempre viéndola desde una ventana.

El paseo de la remembranza, hace difícil la compostura,
Pero como te dije, recordame olvidar...